
Los médicos declararon muerto al bebé de 27 semanas y dos libras. Sim embargo los padres australianos Kate y David Ogg de los gemelos pidierón despedirse del menor en privado. La madre del pequeño lo acarició en su pecho y despúes de dos horas el niño empezó a moverse y ella le unto con su dedo leche materna llamandolo por su nombre y mencionandole el nombre de su hermana gemela Emily, quien había nacido en mejor estado de salud.
0 comentarios:
Publicar un comentario